¡¡¡Hagan algo, por favor!!!
Sospechoso asalto.
(16/05/07)
Juan Carlos Velásquez Mejía
El pasado martes 15 de mayo, como a las 10 de la mañana, varios vecinos del residencial barrio de Plazas de San Buenaventura, volvieron a saber de otro asalto a mano armada, esta vez con un botín de 30 mil pesos en efectivo, a una persona que minutos antes había acudido a la Sucursal del Banco HSBC, ubicada en el Paseo Vicente Guerrero, a realizar el retiro de esa cantidad.
Quien me platicó esta terrible experiencia, que por obvias razones omito su identidad, me señaló que no es la primera vez que sucede esta clase de atracos a personas en ese rumbo de la ciudad. El hecho en sí seguramente fue denunciado ante el ministerio público por la víctima que por fortuna solo fue golpeado en el rostro con la cacha del arma que portaba uno de los delincuentes.
Lo sospechoso de este y otros asaltos ocurridos en esta zona de la ciudad, es que no se haya actuado con más rigor de investigación policial sobre esta sucursal bancaria, pues cómo es posible que las víctimas casualmente antes de ser asaltadas habían acudido a ésta para retirar cantidades distintas de dinero en efectivo.
El sentido común, que parece seguir siendo el sentido menos usado por la policía, a pesar de ser el más común, nos dice que alguien desde el interior de la sucursal, ya sea cliente o empleado, “trabaja” como “soplón” y en contubernio con los delincuentes que afuera del inmueble reciben el “tip” para ubicar y perpetrar los asaltos.
Tampoco es la primera vez que esto sucede en sucursales bancarias, por ello es que desde este espacio, hago una enérgica protesta como ciudadano a las autoridades responsables de la seguridad pública de los diferentes niveles gubernamentales y la privada también, para que actúen con prontitud y solvencia, que para eso están.
No es posible que teniendo elementos suficientes que orientan una investigación de esta índole, se sigan dando estos ilícitos que la mayoría de las veces quedan impunes, con las consecuencias que lamentablemente solo “pagamos” y absorbemos los habitantes de esta ciudad, ante la pasividad y hasta sospechosa lentitud de los cuerpos de seguridad.
La confianza solo se consigue con hechos y no con discursos o estadísticas. Cómo quieren que la gente les crea, si poco o nada se hace cuando se tienen cuadros como este que aquí refiero y que a diario padecemos en diferentes lugares de nuestro estado y en general en el país.
La ola de inseguridad y violencia, que crece como un tsunami, solo se va a contrarrestar con la actuación profesional y comprometida de las autoridades que sean capaces de erradicar corrupción y burocracia. ¿Será posible?
La población hace su parte al denunciar los hechos, por lo que la corresponsabilidad de gobernados y gobernantes debe seguir siendo compartida de manera equilibrada. ¡¡Ya basta, hagan algo, por favor!!
Sospechoso asalto.
(16/05/07)
Juan Carlos Velásquez Mejía
El pasado martes 15 de mayo, como a las 10 de la mañana, varios vecinos del residencial barrio de Plazas de San Buenaventura, volvieron a saber de otro asalto a mano armada, esta vez con un botín de 30 mil pesos en efectivo, a una persona que minutos antes había acudido a la Sucursal del Banco HSBC, ubicada en el Paseo Vicente Guerrero, a realizar el retiro de esa cantidad.
Quien me platicó esta terrible experiencia, que por obvias razones omito su identidad, me señaló que no es la primera vez que sucede esta clase de atracos a personas en ese rumbo de la ciudad. El hecho en sí seguramente fue denunciado ante el ministerio público por la víctima que por fortuna solo fue golpeado en el rostro con la cacha del arma que portaba uno de los delincuentes.
Lo sospechoso de este y otros asaltos ocurridos en esta zona de la ciudad, es que no se haya actuado con más rigor de investigación policial sobre esta sucursal bancaria, pues cómo es posible que las víctimas casualmente antes de ser asaltadas habían acudido a ésta para retirar cantidades distintas de dinero en efectivo.
El sentido común, que parece seguir siendo el sentido menos usado por la policía, a pesar de ser el más común, nos dice que alguien desde el interior de la sucursal, ya sea cliente o empleado, “trabaja” como “soplón” y en contubernio con los delincuentes que afuera del inmueble reciben el “tip” para ubicar y perpetrar los asaltos.
Tampoco es la primera vez que esto sucede en sucursales bancarias, por ello es que desde este espacio, hago una enérgica protesta como ciudadano a las autoridades responsables de la seguridad pública de los diferentes niveles gubernamentales y la privada también, para que actúen con prontitud y solvencia, que para eso están.
No es posible que teniendo elementos suficientes que orientan una investigación de esta índole, se sigan dando estos ilícitos que la mayoría de las veces quedan impunes, con las consecuencias que lamentablemente solo “pagamos” y absorbemos los habitantes de esta ciudad, ante la pasividad y hasta sospechosa lentitud de los cuerpos de seguridad.
La confianza solo se consigue con hechos y no con discursos o estadísticas. Cómo quieren que la gente les crea, si poco o nada se hace cuando se tienen cuadros como este que aquí refiero y que a diario padecemos en diferentes lugares de nuestro estado y en general en el país.
La ola de inseguridad y violencia, que crece como un tsunami, solo se va a contrarrestar con la actuación profesional y comprometida de las autoridades que sean capaces de erradicar corrupción y burocracia. ¿Será posible?
La población hace su parte al denunciar los hechos, por lo que la corresponsabilidad de gobernados y gobernantes debe seguir siendo compartida de manera equilibrada. ¡¡Ya basta, hagan algo, por favor!!
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