miércoles, 29 de agosto de 2007

LEGISLAR PARA EL PUEBLO O CONTRA ÉL/ APRENDAMOS A ADMINISTRAR/ ADIOS 2006, UN AÑO MUY LARGO 181206

LEGISLAR PARA EL PUEBLO O CONTRA ÉL.
(18/12/06)

Diciembre es el mes de estiras y aflojas de cada año en materia de presupuestos, tanto federal como estatal y municipal en el Congreso de la Unión, en las legislaturas y en los cabildos de nuestro país.

En el Congreso federal se da una dinámica muy peculiar ya que los legisladores de las cámaras alta y baja se reúnen por separado en las comisiones que por su materia revisan el paquete económico que les envía el ejecutivo y que contiene las iniciativas y proyectos de Ley de Ingresos y el de Presupuesto de Egresos para el ejercicio fiscal siguiente. Durante este tiempo hemos conocido el contenido de lo que envió el Presidente de la República, a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y entre otras cosas que han despertado polémica, es el relacionado a la creación nuevos impuestos como los que se pretende para aplicarlos a los productores de refrescos y aguas carbonatadas (5%), así como a los consumidores de tabaco en sus diferentes formas, entre otros

Me ha llamado la atención la forma en que los refresqueros han tratado de disuadir a los legisladores y evitar que se apruebe este impuesto ya que señalan en una campaña que ya se deja escuchar en la radio nacional, que en caso de aprobarse vendría a provocar una baja en el consumo de estos artículos y con ello derivar en un negativo impacto en los empleos que esta industria y servicios genera., o sea desempleo.

Sin duda que esto se ocasionará si lo dueños de esta industria ven así de simplista la nueva tributación y así lo verán también los del ramo tabacalero y todos aquellos que han encontrado en México un verdadero paraíso para el consumo de sus productos. No por algo somos el país que mayor consumo de refrescos per cápita hay en el mundo y en el consumo de cigarrillos entre los jóvenes no nos quedamos muy atrás que digamos.

Hay que estar muy enajenado para no darse cuenta que estos empresarios están viendo solo para sus intereses y la salud de los demás les viene valiendo un comino. Por qué mejor no proponen nuevos productos que sustituyan a los refrescos y las aguas carbonatadas que sólo han creado una subcultura de consumo nocivo que ya tiene costos impensables en materia de salud por las diferentes enfermedades que ocasiona la ingesta de estos artículos. Sabemos la gran cantidad de personas que por el solo hecho de consumir un refresco al día se hacen propensos a problemas de obesidad, diabetes, osteoporosis, cálculos biliares, gastritis, por mencionar las más comunes.

Además si la producción de los refrescos tiene como insumo el agua e incluso esta la envasan y la venden sin ningún problema, yo creo que con campañas de publicidad de alto impacto pueden modificar positivamente los hábitos del consumidor. Se que muchos me dirán que qué infantil me estoy viendo para modificar el actuar de un monstruo que ya encontró la manera de hacer dinero en este país de fácil manipulación de las masas con la mercadotecnia.

Y si no recordemos solamente la cantidad de anuncios en radio, televisión, prensa escrita, internet, espectaculares, fachadas de tienditas, promociones, patrocinios de eventos de gran impacto social, utilizando las mejores formas de vender sus productos.

Sé que la propuesta es muy pretenciosa pero les aseguro que si solo intentáramos dejar de consumir los refrescos y cambiarlos por agua purificada, no pasaría nada malo y si mucho bueno, pues habría menos enfermos y mas personas con nuevos hábitos positivos de alimentación y con ello también se detonarían nuevas necesidades de artículos que los actuales refresqueros se encargarían de crear, puesto que así como se le ha ocurrido cada uno de los productos y los ha logrado hacer parte de la “dieta alimenticia diaria” con sus campañas publicitarias y otras técnicas de ventas y penetración de mercado, entonces la cosa cambiaría radicalmente pero para el beneficio de ambas partes: consumidor y productor y por ende de los distribuidores y no habrá desempleo como lo vienen diciendo.

En fin, creo que por primera vez en muchos años el presupuesto gubernamental nos ha permitido reflexionar que tan mal esta nuestra dieta alimenticia y ahora veremos qué tan éticamente y con qué valores se conducirán nuestro legisladores o solamente veremos nuevamente imponerse el poder económico sobre el político, sin importar la salud y bienestar de la población.

Aprendamos a Administrar

Hace muchos años, unos 25 al menos, cuando comencé a trabajar en el sector público, recuerdo que cada año, cuando se daba a conocer el presupuesto de egresos y la Ley de Ingresos, se decía que habría que”hacer más con menos, que se aplicaría un programa de austeridad… que se controlaría más el gasto gubernamental…que se atacaría a la corrupción…que se mejorarían las formas de comprar por parte del gobierno…”, entre otras tantas frases que después ya sólo se utilizaron como forma de comunicar las buenas intenciones de cada año y al final resultaban situaciones que no se explicaban con transparencia y siempre terminaban olvidadas en los expedientes de no se cuántas instancias burocráticas y claro con más ricos inexplicables y uno que otro chivo expiatorio, para taparle el ojo al macho, como dicen en mi pueblo.

Mis estudios en Administración me enseñaron que los recursos son finitos y las necesidades infinitas, por eso también aprendí que cuando los recursos escasean la imaginación se debe acrecentar, pero lamentablemente para este territorio bendito que es nuestro gran País que habitamos mas de 105 millones de seres humanos, no hemos sido capaces de aprender a administrar lo que alguien dijo con romanticismo y realidad de que se trataba del “Cuerno de la Abundancia” y hasta un presidente de la república llegó a señalar en un discurso memorable a finales de los años 70’s: “…ahora nos debemos preparar para administrar la abundancia…”

Me desespera oír a mucho políticos de hoy seguir utilizando en sus periplos esas trilladas y sobre todo imprecisas expresiones de “hacer más con menos”, acaso no se han detenido a pensar que por lo mismo que son finitos los recursos, debemos hacer mas con lo disponible, pues esta por demás decir que son menos cada vez y eso demuestra una y otra vez que seguimos sin entender la frase en sí misma.

Ya basta de modelos eficientistas que lo único que han conseguido es burocratizar en exceso la función pública y con ello incrementar su costo que a su vez se ha convertido en gasto improductivo a cargo del pueblo cautivo que cubre sus impuestos, pero a favor de esa mayoría que le ha encontrado el lado flaco del sistema tributario mexicano para evadir el pago que les corresponde, y que por si fuera poco, el mismo gobierno ocasiona con un sistema engorroso, complicado y débil con los evasores y muy ducho con los contribuyentes cautivos. No se vale que solo el 10% ó 12 % de la población económicamente activa sea la que sostengamos el gasto y la inversión pública de este País y que el restante 90% se la pase sin pena ni gloria y solo se escude en la informalidad y la clandestinidad.


ADIOS 2006, UN AÑO MUY LARGO

Estamos por concluir un año más y parece que el 2006 lo venimos mencionando desde hace al menos 5 años, pues vivíamos la expectación del cambio de gobierno federal y partido político en el poder, entrábamos a una nueva era de condiciones políticas, sociales, económicas y hasta culturales. Finalmente llegó el 2006, con nuevas expectativas de democracia, crecimiento económico y comportamiento social, ante lo mismo. Por eso creo que este ha sido el año mas largo en los últimos tiempos, pues parece que comenzó en el 2001.

Hoy podemos iniciar un recuento de lo que se ha logrado y dejado de hacer en todos los aspectos de nuestra vida en este periodo y algunos tendrán saldo a favor otros en contra y los menos sin novedades.

Busquemos en cada archivo, abierto o continuado o incluso cancelado, de 2006 todo aquello que nos sirva de referencia para replantear, modificar, fortalecer o consolidar nuestras acciones en el nuevo ciclo que esta por comenzar. Pero hagamos un esfuerzo adicional que permita que la suma de cada tarea, proyecto, programa, se dirija al país que deseamos y que así contribuyamos a darnos un México que todos disfrutemos -no solo unos cuantos- con fe, compromiso y actitud de ser mejores habitantes de este planeta.


No hay comentarios: